«La protección de la infancia en entornos digitales», una obra necesaria para protegernos a todos y entre todos

El pasado martes 1 de octubre tuvo lugar la presentación del libro «La protección de la infancia en entornos digitales» en el Espacio Fundación Telefónica. La obra, coordinada por Delia Rodríguez, abogada de familia, mediadora y apasionada de la protección de los derechos de la infancia desde sus inicios, tiene como objetivo recoger este debate y marcar un punto de salida en la lucha de la protección de los menores en la era digital. 

Gracias a la Comisión de Infancia y Juventud de la asociación Woman in a Legal World (WLW), creada por Delia Rodríguez, y cuyo objetivo primordial es la defensa de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, con una especial mención a su protección legal dentro del mundo digital, ha sido posible no solo crear este libro, sino también el coloquio entorno a la defensa de los derechos infantiles y juveniles en el ciclo de debate y diálogo de Fundación Telefónica.

La protección de la infancia en entornos digitales es una obra compuesta por 36 capítulos en los que han participado jueces, fiscales, abogados, médicos, psicólogos, y otros especialistas en infancia provenientes de organismos públicos de renombre y empresas privadas.

Don Luis Prendes, director general de Fundación Telefónica, tuvo la primera palabra del acto con un agradecimiento a los allí presentes e iniciando la presentación inicial del libro. A continuación, doña Ana Belén Martínez Enguídanos, secretaria general de WLW, tomó la palabra: «Hay que potenciar y visibilizar el talento femenino para crear un sector legal diverso donde deje de ser excepcional ver a una mujer en puestos de poder». De este modo daba gracias a las mujeres que forman parte de WLW y que luchan y trabajan cada día para ganar una batalla detrás de otra.

Doña Mar España, la directora de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) y prologuista de la obra, cogió el relevo, en el que no perdió la oportunidad de poner en contexto la situación tan grave en la que nos encontramos. Un momento de «grave reseteo social en cuanto a las prioridades en adolescentes e infancia».

«Una sociedad donde el tabaco y el alcohol tienen una regulación vigente, y donde, sin embargo, la venta de servicios digitales no tiene ningún límite. La sociedad de los hipervínculos, que cada día se encuentra más alejada de su propio eje y de los demás». De tal manera, la directora de la AEPD pedía una labor de compromiso común, de carácter mundial; un pacto social para crear redes sin perder el foco social. Doña Mar finalizó hablándonos concretamente del libro: «Hace dos años no se hablaba de esto, ahora ya hay un anteproyecto de ley para la protección a la infancia, queda mucho por hacer y este libro es un empujón hacia delante».

Tras su intervención, Natalia Tejera, abogada penal, tomó la palabra en nombre de Delia Rodríguez (coordinadora de la obra) que no pudo estar presente por motivos personales. En pocas palabras agradeció a todos aquellos que habían hecho realidad la obra y la describió como «un libro pionero para todos los públicos».

Tras los agradecimientos, tuvo lugar la mesa redonda dirigida por la fiscal Escarlata Gutiérrez. La primera en tomar la palabra fue doña María Pardo, abogada experta en derecho tecnológico y socia de WLF, quien ilustro cómo la IA es revolucionaria comparándola con el momento de aparición de Internet. Aseguró que esta tecnología puede tener un lado muy bueno, pero que, sin embargo, también se dan casos graves de vulneraciones de derechos, casos reales que hoy en día ya son condenados. «Nos encontramos ante madrigueras de conejos que no tienen otro fin que la adicción, hay que regular y educar. Por eso, el fin de esta obra son los menores. Esta obra tiene un enfoque multidisciplinar muy necesario que la hace única en su género».

Natalia Velilla, por su parte, habló sobre la protección que pueden ofrecer los padres ejerciendo la patria potestad, y dejó claro que la manera de hacerlo era «sin miedo, con conocimiento y responsabilidad». Los padres, que tienden a demonizar las nuevas tecnologías, deben aprender a utilizarlas para poder intervenir de forma consciente, ya que los hijos gozan de derechos por supuesto, pero el limite se encuentra en su propia protección: «No hay que delegar la educación digital en terceros, cuando a un niño de catorce años se le da un móvil, se le está dando acceso a todo un mundo, un mundo del que no tenemos control».

José María de Pablo introdujo una nota de color diferente, tanto en el libro, según explicó, como en la intervención, al tratar la faceta del menor como delincuente. La exposición a la red conlleva riesgos, lo que ha llevado a muchos menores a cometer delitos sin ser conscientes de ellos. El abogado penalista expuso el crecimiento exponencial de casos de menores delincuentes en la red y el plan de reeducación y principio de oportunidad que se pone en marcha cuando esto ocurre. Sin embargo, concluyó con que «un menor delincuente es una víctima más, lo que tratamos de hacer con esta obra es una llamada de atención, una reivindicación».

La psiquiatra infantil Abigail Huertas, por su parte, destacó que la salud mental de los jóvenes ha empeorado desde 2012, y llamó la atención a «una tecnología que se ha implantado en la infancia sin estudiar antes qué era lo mejor y cuáles eran sus posibles efectos tanto negativos como positivos. Ahora, estamos viendo los resultados». De tal manera, aclaraba que aún queda mucho trayecto por recorrer.

A modo de conclusión, Laura Cuesta cerró la mesa redonda con una reflexión sobre la sociedad de la información en la vivimos: «Una sociedad polarizada con necesidad de crear audiencia y que busca titulares sensacionalistas». Además, afirmaba que «el entorno digital no es el enemigo, es un entorno más en el que hay oportunidades y retos, donde, hay que proteger a la infancia ejerciendo la patria potestad a través de la educación, dentándoles de competencias y habilidades con el fin de crear personas críticas, reflexivas y que alcancen un nivel de madurez suficiente para enfrentarse a la realidad» además de buscar y alcanzar «una tecnología ética y algoritmos transparentes».

 Luis Miguel Tigeras, gerente de la Librería-Editorial Dykinson, agradeció la participación de los autores en la publicación de la obra, entre los que se destaca a Ana Isabel Gutiérrez Salegui como coautora. que ha llevado a cabo la publicación de la obra,  que agradeció la participación de cada uno de los autores. Tras él, Natalia Tejera volvió a tomar la palabra a modo de despedida, recordando que los beneficios de la obra irán destinados a UNICEF. Por último, doña M.ª Ángeles Espinosa Bayal, presidenta del Comité de Estudios y Formación de UNICEF, tomó la palabra para despedir el acto, dando valor a la función social y real que tiene la obra.

En el acto estuvieron presentes los patrocinadores y entidades colaboradoras tales como Vestalia “Abogados de Familia”ISDE Law & Business SchoolUNICEF, Fundación ANARPantallasAmigasFide Fundación y StopHaters, entre otros.

 

FUENTE: https://www.dykinson.com/noticias/859/